REGLA DE VIDA

I. UNA LLAMADA QUE NOS HABLA AL CORAZÓN LLAMADOS A LA SANTIDAD

5°. La santidad de Dios ha sido plenamente develada por Cristo, que ha venido a revelar el amor infinito del Padre, al sellar con su sangre la Alianza con los hombres y así restablecernos en la verdad de su condición humana. Su vocación, el sentido último de su existencia, es "alabar, hacer reverencia y servir a Dios" (S. Ignacio).

6°. El Espíritu Santo nos ha santificado plenamente por medio del bautsmo y de la confinnación. Somos, en adelante, miembros del Cuerpo de Cristo y participantes en su vocación y en su misión. Así, captados por un amor que precede al nuestro, estamos invitados a entregarnos, totalmente y sin reservas, a la inspiración del Espíritu, y le dejamos habitar, orientar y unificar nuestra vida según cada una de sus dimensiones.

7°. Deslumbrados y modelados por el Evangelio, llenos de gratitud, elegimos seguir a Cristo lo más de cerca posible. El nos invita a tomar su camino de vida, el camino de su Pascua de muerte y resurrección, con el fin de que todo hombre, creado a imagen de Dios y, ya salvado por Jesucristo, pueda abrirse al don de la vida nueva. "La gloria de Dios, es el hombre vivo, y la vida del hombre, es la vision de Dios" (S. Ireneo).

8°. Esta llamada radical a la santidad, la oímos en la Iglesia. Nos arraiga en la vocación y en la misión de todo el Puebio de Dios, pueblo de la Alianza, portador de la Buena Nueva que debe anunciar a todos los hombres.

LOS 80 ESTATUTOS DE LA SOCIEDAD DE VIDA EVANGÉLICA DEL CORAZÓN DE JESÚS

1°. La Sociedad de Vida Evangélica del Corazón de Jesús forma parte de la familia espiritual de los Grupos Evangelio y Misión, en la fidelidad a la inspiración de Pedro de Clorivière, en unión estrecha con los Institutos Seculares del Corazón de Jésus. Se trata de una asociación pública de fieles, universal, de derecho, dotada de personalidad jurídica, regida por los presentes estatutos, por el derecho de las asociaciones y por las leyes de la Iglesia. Su sede social esta establecida en Paris, Francia.

2°. Acoge a miembros del Pueblo de Dios, hombres y mujeres de todas las culturas y de todas las naciones, casados, viudos y solteros, clérigos y laicos.

3°. La Sociedad, de tradición ignaciana, invita a sus miembros, a cada cual según su estado de vida, a una búsqueda de vida evangélica contemplativa y activa mediante un compromiso apostólico, en medio del mundo.

4°. Compenetrada de que la riqueza de las diferencias, puestas al servicio de la unidad, será fuente de santificación y de fecundidad apostólica, la Sociedad, invita a sus miembros a establecer, entre ellos, una verdadera comunión fraternal.

ESTATUTOS DE LA SOCIEDAD DE VIDA EVANGELICA DEL CORAZON DE JESÚS

1.       La Sociedad de Vida Evangélica del Corazón de Jesús forma parte de la familia espiritual de los Grupos Evangelio y Misión, en la fidelidad a la inspiración de Pedro de Clorivière, en unión estrecha con los Institutos Seculares del Corazón de Jesús.

Se trata de una asociación pública de fieles, universal, de derecho..., dotada de personalidad jurídica, regida por los presentes estatutos, por el derecho de las asociaciones y por las leyes de la Iglesia. Su sede social está establecida en Paris.

2.       Acoge a miembros del Pueblo de Dios, hombres y mujeres de todas las culturas y de todas las naciones, casados, viudos y solteros, clérigos y laicos.

3.       La Sociedad, de tradición ignaciana, invita a sus miembros, a cada cual según su estado de vida, a una búsqueda de vida evangélica contemplativa y activa mediante un compromiso apostólico, en medio del mundo.

4.       Convencidos de que la riqueza de las diferencias, puestas al servido de la unidad, serán fuente de santificación y de fecundidad apostólica, la Sociedad invita a sus miembros a establecer, entre ellos, una verdadera comunión fraternal.

PEDRO JOSE DE CLORIVIERE

Un camino, una Regla de Vida...